¡TEN ÁNIMO!

¡Anímate! – ¿Estás preocupado por algo? ¿Hay una carga sobre tu espíritu? Mientras estés en este mundo habrá cosas que te molesten; habrá cosas que te decepcionen.

Cuando estamos preocupados, no podemos ser sensibles al Espíritu de Dios. Necesitas un espíritu libre para orar. Necesitas un espíritu libre para escuchar a Dios. No puedes escuchar a Dios cuando tu espíritu está turbado. Si oras en esos momentos, estás hablando contigo mismo. Por tanto, pídele a Dios un espíritu libre. La meditación revela la carga de nuestro espíritu. Pídele al Señor Jesús: «Toma más de mí; dame más de Ti». Cuando medites esto, encontrarás el gozo. Viene naturalmente; viene espontáneamente. La meditación en la Palabra de Dios es una visita con Él.

Juan 16:33, «Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo».

«En este mundo habrá problemas. Pero ¡alégrense! Yo he vencido». Es por eso que Jesús oró: «Oro para que tu fe no falle». Esto significa que habrá problemas que tentarán tu fe, pero como creyente, Dios está al tanto de lo que estás pasando. Ha sido profetizado que pasarás por ellos pero como uno de Sus seguidores, no te perjudicará sino que te mejorará si permites que te acerque más a Él.