El domingo 11 de marzo de 2018 fue otro día sobresaliente en presencia de Dios en La Sinagoga Iglesia de Todas las Naciones, llena de testimonios edificantes para la fe, adoración henchida de espíritu y enseñanzas colmadas de sabiduría.

 

El Profeta T.B. Joshua habló de la importancia de que el Espíritu Santo dirija la vida de un Cristiano en un sermón titulado DE ACUERDO AL ESPÍRITU DE DIOS. «La fe requiere de nosotros que hablemos antes de que veamos o sintamos. Tienes que empezar creyendo, confesando y actuando en la Palabra de Dios. Entonces podrás traer a Jesús a escena de inmediato», animó a la congregación. «Lo que hay en tu corazón determina la vida que vives. Es decir, que las palabras que hablas determinan la vida que disfrutas. Las palabras que un hombre hablan crean las bendiciones o las maldiciones que se cruzan en su camino. La razón es que la boca es el revelador de la creencia en tu corazón».

 

Continuó explicando cómo la «ceremonia» se ha infiltrado en los servicios cristianos hasta el punto de que son los planes del hombre y no los del Espíritu Santo los que nos dirigen: «Sólo puedes ser un Cristiano de acuerdo con Su espíritu. Nadie puede decir “Jesús es el Señor” si no recibe la ayuda, la guía y el consejo del Espíritu. Quiero decir que para ser un Cristiano debes dejarte guiar. Hay una diferencia entre Cristiano y persona religiosa. Con lo que estamos viendo hoy en el mundo, es muy difícil saber quién es un Cristiano porque la ceremonia se ha apropiado de la Iglesia. Solo mediante el Espíritu de Dios puedes saber quién es un Cristiano o una persona religiosa porque la ceremonia está en todas partes… siguiendo un programa, un calendario y un guión».

 

A modo de conclusión, el Profeta T.B. Joshua enfatizó la importancia de la meditación en la Palabra de Dios para que las verdades que pueden cambiar tu vida entren en tu corazón y así influyan positivamente en tu comportamiento. «El Espíritu de Dios será liberado en la medida en que tú honres Su Palabra. ¿Cómo podemos honrar Su Palabra? Pues la honramos cuando comenzamos a meditar. La meditación trae revelación. Meditando, nuestro corazón actúa con la Palabra. Es decir, tu espíritu actúa con la Palabra y, cuando esto ocurre, comienza a influir en tu conducta y tu carácter».

 

Antes, la Evangelista Ruth ofreció un animado mensaje titulado DESCÚBRETE A TI MISMO, centrado en la importancia de descubrir y seguir la dirección de la llamada de Dios para tu vida. «Si supieras cuánto le costó a Jesús dar lugar la a la vida, sabrías cómo utilizarla. Sin embargo, en lugar de ser consciente del potencial que Dios nos ha otorgado, nos pasamos la mayor parte del tiempo anhelando, deseando y orando para ser otros distintos a los que somos. ¿Te has parado a pensar alguna vez que alguien, en algún lugar, pueda estar deseando ser como tú? La mayor enfermedad del mundo actual es el descontento», exhortó a la congregación.

 

Llamó la atención sobre hecho de que la riqueza material no debe considerarse una regla con la que medir el éxito: «Que un hombre sea rico no quiere decir que sea mejor que tú en presencia de Dios. No te preocupes cuando veas a otros que parecen haber alcanzado el éxito y que lo logran empleando medios dudosos. No utilices los estándares de otras personas para medir tu fuerza o tu debilidad».

 

El mensaje concluyó con un potente recordatorio de que la felicidad es el «poder conquistador» para todos los creyentes. «Ten presente que la verdadera felicidad no proviene de obtener lo que queremos, sino de desear estar cerca de Dios. Siempre que nuestro gozo se desvanece y nos deja estériles y vacíos, demuestra que hemos dejado de estar en contacto y en armonía con Dios. ¿Qué felicidad es esa? Que te has descubierto a ti mismo, unido de un modo singular al Creador del Cielo y de la Tierra. Jesús te ha bendecido, te ha sanado, te ha rescatado y te ha redimido, pero Él no lo mantendrá todo ahí para ti. Hasta el fin de tus días, tienes que interpretar tu papel. ¿Y cuál es ese papel? La apreciación».

 

El Profeta T.B. Joshua comenzó entonces a deambular entre la congregación ofreciendo profecías de una exactitud sin igual, ya que Dios lo utiliza para exponer la causa de los problemas de la gente y ofrecerles una solución duradera, liberándolos. El tiempo de la Oración Masiva resultó igualmente fascinante, ya que fue el momento en que la gente congregada en el auditorio conectó con la bendición celestial para recibir sanidad, liberación y libertar en nombre de Jesús.

 

A continuación dejamos un resumen de los inspiradores testimonios que se compartieron.

 

¡CARRERA ESTANCADA QUEDA DESBLOQUEADA EN LA VIDA DE UN ESCÉPTICO!

El señor Zhoromi Kazhinga, a pesar de ser un trabajador industrioso y dedicado empleado en uno de los mayores bancos de Zambia, se sentía infeliz y llevaba insatisfecho once años, porque todos sus esfuerzos y el compromiso con que se dedicaba a su labor no le habían proporcionado el éxito esperado. Con dolor comprobaba como compañeros que se habían incorporado al banco más tarde que él ascendían por la escalera del éxito, incluso algunos a los que él mismo había enseñado. Todos los esfuerzos que había hecho por ascender en su carrera habían resultado inútiles. Solicitaba puestos para los que sabía que estaba cualificado de sobra pero su candidatura quedaba descartada sin motivo aparente. Frustrado con aquella situación, Zhoromi decidió seguir cursos superiores para mejorar sus credenciales, pero ni aun así logró marcar alguna diferencia en su carrera. Su esposa, que sabía lo mucho que estaba luchando sin obtener resultados, también comenzó a preocuparse y ambos empezaron a buscar una solución que los sacase de aquella situación.

 

Un día descubrió Emmanuel TV y lo que vio le interesó sobremanera. Se pasaba horas sentada delante de la pantalla y, cuando su esposo volvía del trabajo, le contaba los distintos testimonios que había estado escuchando. Pero Zhoromi era una persona que creía firmemente en sus capacidades personales e inicialmente no creía que su progreso pudiera estar en manos de Dios. Estaba convencido de que, simplemente, tenía que trabajar aún más.

 

Pero su esposa decidió visitar La SCOAN y, como socia de Emmanuel TV, recibió el Nuevo Agua de La Mañana. Al volver a Zambia, ambos se arrodillaron juntos, oraron y ministraron el Nuevo Agua de La Mañana en todas sus credenciales. Dios no tardó en visitarle. Poco después, las cosas empezaron a cambiar para mejor en su carrera. Pudo por fin terminar el curso que había empezado en Durban y se graduó con magníficas calificaciones. Una oportunidad se abrió ante él en forma de puesto de trabajo en el que antes había sido rechazado, pero en aquella ocasión, con la fe en el corazón, oró con el Nuevo Agua de La Mañana y envió su solicitud. Zhoromi sabía que había mucha competencia para el puesto, ya que había personas más cualificadas que él que también lo habían solicitado, pero para gloria de Dios, al final se decantaron por él para que ocupase el puesto de Director Regional en uno de los principales bancos de Zambia. Explicó a la iglesia que en su nuevo puesto tiene que supervisar y coordinar veintitrés sucursales en su región.

 

Tras once años de estancamiento, gracias al Nuevo Agua de La Mañana, Dios había hecho posible que saboreara por fin el progreso, y con una alegría desbordante, mostró sus credenciales a la congregación.

 

«ME SALIÓ UN GUSANO DE LA NARIZ…»  SACERDOTE ANGLICANO RETIRADO

El sacerdote anglicano, Venerable Banmah Victor, de ochenta y dos años, relató que nunca había tenido relación alguna con La SCOAN hasta que hubo de enfrentarse a una «montaña» en su vida que se negaba a moverse. Se refería aun problema auditivo acompañado de un dolor intenso. Esta dolencia le provocaba con frecuencia una notable inestabilidad que acababa haciéndole caer. «A veces me caía en mi propia habitación». Después de consultar con distintos médicos y de tomar los fármacos que le prescribían con la esperanza de terminar o al menos amortiguar el problema, no logró mejoría alguna. Y además de este problema, Venerable Banmah soñaba con frecuencia que consumía carne acompañado de personas muertas.

Un día su esposa descubrió por casualidad Emmanuel TV, y Venerable Banmah comenzó a orar con el Profeta T.B. Joshua tocando la pantalla del televisor. Mientras oraba con el hombre de Dios, la prueba del poder de Dios se manifestó con fuerza: «Sentí una extraña sensación en los oídos y en la nariz». Lo que jamás se habría podido imaginar era que lo que le impedía oír con claridad estaba a punto de salirle por la nariz ¡en forma de gusano de un centímetro y medio! Ni que decir tiene que el anciano se quedó estupefacto. Después de la oración, experimentó un gran cambio en su salud y bienestar. «Ya no pierdo el equilibrio y oigo perfectamente», testificó junto a su esposa.

 

A continuación, Venerable Banmah completó la segunda parte de su testimonio relatando que, mientras el hombre de Dios ofrecía oración, refiriéndose a «aquellos que comen con muertos en sueños», se frotó el estómago haciendo un movimiento descendiente e inmediatamente sintió un temblor en su interior, acompañado de una necesidad perentoria de ir al lavabo. Una vez allí, se quedó atónito al ver el objeto redondo que salió de su cuerpo, «grande como una pelota de pin pon», y que según él «parecía exactamente una nuez». ¡Por fin había llegado el final de aquellas pesadillas que le acosaban por las noches en las que se veía a sí mismo comiendo con muertos!

 

A la luz de su propia experiencia, Venerable Banmah dejó el siguiente consejo: «Si escuchas la voz de Dios, no endurezcas tu corazón. La voz del Profeta resuena en todos los continentes. Hermanos, ¿por qué no escucharlo?» Y su esposa también tuvo palabras de testimonio sobre la bondad de Dios: «A Dios sea la gloria por usar al Profeta T.B. Joshua para hacer grandes obra en la vida de las personas». Y dirigiéndose a aquellos aun escépticos y cínicos, los llamó a creer: «Los Tomás que dudan, los fariseos que no tienen fe, Dios aún está diciendo algo: ¡No endurezcan sus corazones!».

 

«¡LAS HECES ESTUVIERON TRES AÑOS SALIÉNDOME POR EL ESTÓMAGO!»

La señora Kate Chimezie se despertó con un intenso dolor en el abdomen. Urgentemente se trasladó al hospital y allí le dijeron que sus intestinos se habían roto y que era necesario intervenirla de inmediato, pero en aquel centro médico no se atrevían a hacer la necesaria operación por la gravedad de su situación. El segundo hospital al que la trasladaron sí acometió la cirugía, pero una vez en el quirófano dudaron entre no seguir adelante y cerrar, o bien continuar con la operación, ya que la mayor parte de su intestino estaba afectado. La operación siguió adelante, pero el sufrimiento que vino después fue terrible. Le habían salvado la vida, sí, pero la calidad de su existencia había quedado mermada seriamente. Aparte del dolor que seguía soportando, descubrió que la orina y la materia fecal ¡salían de un agujero que tenía en el estómago! Tres o cuatro veces al día, se levantaba el vendaje y encontraba sangre, heces y orina en el estómago. Retiraba el vendaje, se limpiaba la herida abierta y volvía a vendarse. Además de semejante horror, había muchas cosas que no podía hacer: no podía caminar bien, ni comer ni beber estando de pie, ni hacer ninguna clase de ejercicio. El único modo en que podía ingerir comida o líquidos era tumbada. El dolor era insoportable. Tuvo que cerrar su negocio y sus hijos se vieron muy afectados negativamente. Agonizó en este estado durante tres años hasta que decidió acudir a orar a La SCOAN. Aquel bendito día, fue localizada por el Espíritu Santo cuando el Profeta T.B. Joshua le reveló un mensaje profético: «Hay síntomas en tu estómago. Una operación que salió mal. Cuando hayas orado, vuelve y corregirán su error».

Las palabras proféticas del Profeta T.B. Joshua hicieron que el miedo a otra operación se desvaneciera, de modo que volvió al hospital, tal y como le había indicado el hombre de Dios que hiciera, y les dijo que debían corregir el error que habían cometido durante la primera operación. En un principio le dijeron que tendrían que practicarle una colostomía y dejarle una bolsa puesta, pero ella se negó, aduciendo que el Profeta T.B. Joshua había profetizado que el médico corregiría el error cometido. Los médicos, al oír mencionar el nombre del profeta, cambiaron de opinión de inmediato y accedieron a llevar a cabo la nueva intervención. Tres días más tarde, Kate salía del hospital fuerte y saludable, en nombre de Jesús. La orina y las heces se evacuaban debidamente de su organismo, el agujero del estómago estaba cerrado, su capacidad de movimiento restaurada y todo era nuevo en su vida, en el nombre de Jesús.

 

Sus hijos, llenos de gozo, aconsejaron a todos que siguieran escuchando la Palabra de Dios en toda ocasión ya que, cuando Dios habla, los sabios escuchan. ¡Fue un mensaje profético lo que guió a su madre en aquella tormenta de muerte y la palabra que la devolvió a la vida!

 

¡EL CONTRATO MÁS IMPORTANTE DE SU VIDA!

Nolusola Kolawole Samuel estaba enfrentando dificultades económicas, mientras los contratos sustanciosos a los que su empresa debería tener acceso se acumulaban sobre su mesa. Como Socio comprometido de Emmanuel TV, Olusola viajó desde el estado de Sokoto en Nigeria a La SCOAN en busca de la intervención de Dios. Fue uno de los primeros socios de Emmanuel TV en recibir el Nuevo Agua de La Mañana. El Profeta T.B. Joshua dijo a los Socios de Emmanuel TV que el Nuevo Agua de La Mañana erradicaría la pobreza de sus vidas y él lo creía de todo corazón. Olusola dijo que, cuando inició su viaje de vuelta al estado de Sokoto, recibió una llamada que le cambiaría la vida, en la que fue informado de que se le había otorgado un contrato millonario con la universidad federal que reescribió la historia de su vida económica.

Los limitados recursos que tenía en aquel momento en sus arcas no fueron cortapisa para él, sino que oró y se ministró el Nuevo Agua de La Mañana: un proveedor de los materiales que debía utilizar para iniciar el proyecto le proporcionó lo que necesitaba sin exigir el pago por adelantado. Olusola progresó con aquel mega contrato y ahora está loco de alegría, dando las gracias a Dios por semejante progreso, y dirigiéndose a la congregación y a los espectadores de todo el mundo dijo que debían «poner su confianza en Dios. Todo lo demás, vendrá por añadidura».